Como en todas las manifestaciones, las cifras variaron según las fuentes. Los organizadores dijeron que había más de dos millones de asistentes. La Comunidad de Madrid (cuya presidenta acompañaba a los organizadores detrás de la pancarta), a través de un conteo hecho a pié de calle por sus técnicos de protección civil, estimó que se habían reunido alrededor de millón y medio de manifestantes. Por último, la Delegación del Gobierno, midiendo la participación desde helicópteros de la Policía Nacional, determinó que habían sido unos 407.000 concurrentes.
Mi propia experiencia me dice que lo de los dos millones es literalmente imposible. Sólo se alcanzó esa cifra tras los atentados del 11-M, y, en aquella ocasión, todas las calles contiguas a las del recorrido oficial estaban absolutamente colapsadas de gente. En esta manifestación, con un recorrido mucho más breve, apenas se ha sentido en calles cercanas como Alfonso XII o Serrano. La misma razón, y además la presencia de Esperanza Aguirre en la manifestación episcopal, me llevan a sospechar que el número dado "a pié de calle" por la Comunidad de Madrid es excesivamente generoso.
407.000 manifestantes, por tanto, traídos de toda España merced a una cuidadosa planificación llevada a cabo por la Conferencia Episcopal y sus organizaciones interpuestas (CONCAPA, Foro de la Fachafamilia, HazteOír, COPE, etc.) Realmente no es para tanto, ni mucho menos. Pero, no obstante, el Gobierno debería reflexionar, pues se ha dejado llevar por un innecesario moderantismo que ha conducido al mismo resultado que si hubiera suprimido directamente la enseñanza de la religión de la escuela pública. Ya puestos, y visto el "talante" de la secta católica y su voluntad de negociar, si ZP hubiera tirado por la mayor, al menos habría complacido a sus votantes. Así, ni a unos ni a otros.
Ahora estaría bien que el PSOE, ERC y el Grupo Mixto apoyaran la enmienda de IU por la que se elimina la religión del currículum escolar. Así se haría parcialmente verdad lo que tanto han coreado los manifestantes de ayer. Digo parcialmente, porque nadie les impide que enseñen y aprendan las cosas de su superstición en sus colegios privados, así como en parroquias, conventos, mezquitas, sinagogas y conciliábulos variados.
Una última reflexión. Asombrosas y dignas del Goebbels de la mejor época de esplendor nazi fueron las declaraciones del miserable Acebes durante la manifestación episcopal: "Los jóvenes quieren una educación en libertad, sin imposiciones, sin alguien que les diga cómo pensar". ¿Se referirá el ex-ministro a los directores espirituales de los colegios del Opus dei o de los legionarios de Cristo? ¿Se referirá quizá a los catequistas que les dicen lo que está bien y lo que está mal, guiándose por la dudosa autoridad de la Biblia, un libro lleno de mentiras? Creo más bien que Acebes considera que la única educación en libertad posible es la que pasa por el catecismo. Conociendo su pertenencia a un grupo fundamentalista cristiano, no es de extrañar.
Insultos al Presidente del Gobierno, habituales en todos los actos convocados por la ultraderecha cristiana. En esta ocasión, se le llama "necio". Foto: Diario Crítico.
Pensaba que las familias católicas, en vez del armario, tendrían que salir del confesionario. Pero prefieren permanecer dentro y de rodillas ante el cura. Atención a la identificación de ZP con ETA, también una costumbre en este tipo de actos. Foto: Diario Crítico.
No me cabe ninguna duda de que lo serás... en una de las universidades de la secta católica, como la de Navarra, la de Deusto, la de San Antonio de Murcia, la San Pablo-CEU, la Pontificia de Comillas... o, como César Vidal, obtendrás un "doctorado" en una "universidad" americana por correspondencia. Foto: El Mundo
Todas juntitas, para no perderse (aunque con tales atuendos va a resultar difícil). Foto: El Mundo.
Me recuerda a una canción escolar:
Qué buenas son
las madres ursulinas,
qué buenas son,
que nos llevan de excursión...
No se sabe si este asno parodia a un estudiante con toga o a un cura con sotana (y con ese remedo de alzacuellos blanco) . ¿Cómo le habrán dejado desfilar en la manifestación de los obispos? ¿Se habrá sentido aludido alguno de ellos? Razones no les faltan, el parecido es más que notable; y eso que no hemos oído rebuznar al zopenco. Foto: El Mundo.
La ultraderecha cristiana gusta de movilizar a sus figuras: a la izquierda, el Dr. Maligno Blanco, vicepresidente del Foro de la Fachafamilia; a su lado, el orondo "historiador" y telepredicador de la COPE, César Vidal. Este último, aunque dice que es protestante, se solidariza con sus hermanos católicos si la movida va contra ZP. Todo por la causa. Foto: Libertad Digital.
Juan Manuel de Prada, escritor y columnista en el diario Abc, con su hija (suponemos) a los hombros. Contestación a la pancarta de la niña: No pasa nada, cielo, sólo que tu padre te ha llenado la cabeza de mentiras. Si eres inteligente, cuando seas mayor podrás reprochárselo. De momento, tú calla y lleva la pancarta como él te ha dicho. Foto: Libertad Digital.
Mi favorita. Me gustaría poder hablar con este buen hombre para saber si eso se lo ha preguntado a "dios". ¿Qué le habrá contestado? ¿Puedo yo también ser su enemigo? Es que me hacía ilusión... Foto: Abc.
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